Blog Oficial de la actriz y escritora Sevillana María de Adorna

Bienvenidos a la web oficial de María Muñoz Ballesteros, más conocida como "María de Adorna". Actriz sevillana, mujer con carácter, apasionada y luchadora. Artista Sevillana, dedicada en cuerpo y alma a su gran pasión "El Teatro". Sus recuerdos, sus pensamientos, sus pasiones, SU VIDA.

En este lugar se intentará dar a conocer a esta artista, escritora y actriz sevillana de 84 años que pese a su edad no ha dicho no a las nuevas tecnologías. Ella contará sus recuerdos, hará memoria de su vida paso a paso. Una Guerra, una Niña, un Amor único, un Trocito de Historia.

martes, 28 de enero de 2014

7ª Parte del Resto de mi Vida...


Margarita entre el cariño de sus padres, abuela y tíos iba creciendo, en septiembre de 1960 cumpliría 3 años y ese mismo mes iba a tener un hermano o hermana, no sabíamos. En aquella época aún no estaban las cosas tan adelantadas en pruebas de ecografías, etc. como ahora. 

Ella me preguntaba:

-Mama... ¿tu que quieres que traiga la cigüeña?

-Una niña para que tu tengas una hermanita- le decía yo.

No se el motivo, quizás porque nunca tuve una hermana si quería que mi niña la tuviera.

Por aquel entonces se estrenó el corto de un parto en vivo, era la primera vez que algo así se estrenaba en cines, no recuerdo muy bien el nombre pero creo que algo así como "Elga" y esto me dió pie para que un día a la pregunta de Margarita pudiera contestarle:

-Mama, tu estas muy gorda, cuando la cigüeña traiga a la hermanita no podrás cogerla en brazos.

-Si podré, porque cuando verga la hermana ya no tendré tanta barriga.

-¿Por qué?

-Porque ya no estará aquí dentro la hermano o el hermano.

Nunca olvidaré la cara de mi madre y Adorna al escucharme hablarle de esas cosas a la niña.

-Ven... toca la barriga de mama.

Ella puso su manita en mi vientre y dio un respingo.

-Se mueve...

-Claro... está viva.

-¿Y por donde va a salir?

-Eso lo hacen los médico, ellos le ayudaran.

Dió media vuelta y se fue a jugar al jardín.

Mi madre fue la primera en decirme, no me puedo creer que le hayas quitado la inocencia de saber que no viene la cigüeña. Adorna -¿por qué le has dicho que estaba en tu vientre?

-Porque no quiero mentir cuando me pregunte cosas, además yo lo sabía desde que tenía 5 años y nació mi hermano Manolo y cuando nació el Chico casi lo ví nacer, así que a mi dejarme porque no pienso que mis hijos se críen con cuentos.

Se quedaron callados los dos.


Margarita cuando nació su hermana

El 4 de septiembre de 1960 nació mi segunda hija, Inmaculada. Margarita no cumplía los 3 años hasta el día 15. A los dos días de nacer cuando volví a casa le dije:

-Mira a tu hermana...

Se quedó mirándola un buen rato y dijo:

-Qué pequeña es.

-Sí - le dije yo - ahora tu y yo tenemos que cuidarla, papa también y la abuela como te hemos cuidado a tí.

-Pero yo soy mayor.

-Claro... por eso cuando yo la bañe tu me ayudaras.

Hoy pienso que desde ese momento la estaba haciendo responsable como ha sido siempre para todas sus cosas.

Cuando pasaron los primeros minutos y todos vieron a Inmaculada, la puse en la cuna y Margarita vino me cogió de la mano y me dijo:

-Ven... enséñame como ha salido la hermana.

Adorna me miró y le hice una señal. Cuando estábamos las dos solas le enseñé la cicatriz que tenía en mi vientre de la operación de ovarios antes de tenerla a ella.

Muy seria me pregunto si me dolía, le dije que un poquito.

Por lo demás todo iba bien. Cuando la bañaba ella me ayudaba, yo le decía, anda vamos a bañar a la llorona para que coma y se duerma, ella siempre me decía, vamos mama.

Desde que nació su hermana empezó a decir mama mas que nada, antes era mas papa y abuela. 

-Mama... la hermana está llorando, mama vamos a bañarla, mama está despierta...mama quiere comer- Así todo el día.

Le daba muchos besos en la carita y le dije que no la besara en la cara que la besara en las manitas. Me miró y me dijo:

-¿En las manitas?... se las mete en la boca.

No supe que decirle, Adorna y yo nos miramos y nos quedamos con la boca abierta, de estas cosas tengo tantas que no terminaría pero ya las contaré en su momento.

Voy a contar un poco de mí. Eran dos hijas, el padre, mi madre y dos hermanos los que dependían de mi. Ropa, casa, compras, comida. Adorna me ayudaba por las tardes cuando venía del trabajo. Mi madre me ayudaba con las niñas. Cocinaba con carbón, lavaba en la pila que tenía en el patio, ya hiciera frió o calor por eso hoy dedico un recuerdo a todas las mujeres de mi época que tanto tuvimos que trabajar para criar a nuestros hijos.

No quiero decir con esto que las mujeres de ahora no trabajen quizás mas que nosotras entonces pero con otros medios mas cómodos que nosotras.

Así que nos olvidamos de el teatro por unos años, mi entretenimiento por la noche hasta que me rendía el sueño era coser  y hacer punto porque nunca he podido acostarme temprano, hoy todavía me dan mas de la una de la madrugada haciendo punto, leyendo, escribiendo o viendo la tele.

La verdad nunca he necesitado dormir mucho pero en esa época entre el pecho cada 3 horas, cambiar a la pequeña y los trabajos de la casa, las horas volaban y me faltaban a veces horas del día.
Inmaculada el día de su bautizo


Pasaron los meses y llegó el bautizo de Inmaculada, fue como el de su hermana en casa, con amigos y familia. Llegaba la Navidad y Adorna le preguntaba a Margarita que le iban a traer los Reyes Magos y ella siempre decía que un teléfono, aquí tenéis otra prueba de que fue adelantada en su tiempo (la vecina de al lado trabajaba en telefónica y en su casa tenían teléfono, le encantaba cogerlo y decir: dígame...), nos costó recorrer Sevilla de punta a punta para encontrar un teléfono rojo para que pudiera marcar el número de la Estación de Autobuses y hablar con su padre.

Quiero decir con todo esto que a pesar del trabajo, de las malas noches, eramos felices con nuestras hijas y no echábamos de menos el teatro como todos nos habían dicho. Mi madre, mis hermanos y sobre todo adorna y mis niñas eran mi vida y no necesitaba mas.

4 comentarios:

  1. Señoras y señores estoy a punto de nacer....en cuanto kenedy se compre el descapotable...ya

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  2. Ya tenía a tu madre una de las mejores cosas que me han pasado en esta vida y por supuesto eso hizo que luego vinieras tu, un beso.

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